En medio del discurso de apertura de las sesiones ordinarias en el Congreso de la Nación, el presidente Alberto Fernández hizo una pequeña mención sobre la situación crítica que atraviesa Santa Fe en cuestiones de seguridad y responsabilizó a la Corte Suprema. Se limitó a decir que durante el 2022 enviaron 1.000 efectivos de Gendarmería Nacional a Rosario, año récord de homicidios.
En medio de gritos, ausencias y mucha euforia, el presidente argentino dio su discurso y no desaprovechó la oportunidad para continuar con su enfrentamiento con la Corte Suprema de Justicia, y en el medio hizo mención de la situación complicada que atraviesa Santa Fe en cuestiones de seguridad.
“Nuestras fuerzas de seguridad vienen multiplicando sus tareas de control fronterizo y su colaboración con todas las provincias que lo solicitan. Durante el año pasado se reforzó la presencia de Gendarmería Nacional en Rosario con 1000 efectivos”, señaló el Presidente.
Y agregó: “El trabajo de las fuerzas federales se realiza en coordinación con las fuerzas provinciales. Así, las fuerzas nacionales se despliegan en barrios complejos de Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires y Santa Fe”.
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Avanzando un poco más en su discurso, Alberto Fernández volvió a apuntar contra la Corte Suprema, y fue la segunda mención de Santa Fe: “Así como el Poder Ejecutivo padeció la intromisión del Poder Judicial en funciones que le son propias, este mismo Congreso debió soportar la intromisión en sus prerrogativas cuando la Corte Suprema se arrogó indebidamente la facultad de disponer cómo debe este cuerpo legislativo designar sus representantes ante el Consejo de la Magistratura”.
