En este caso, las probabilidades de padecer una enfermedad grave son altas y se puede requerir una hospitalización.
La mayoría de casos se están registrando, además de Brasil, en Paraguay, Colombia, México y Nicaragua, pero el caso del primer país es el que más está alarmando a los expertos.
La tendencia al aumento de casos de dengue en la región se hizo clara el año pasado, cuando se registraron 4,5 millones de casos (de 5,5 millones en el mundo). Aunque su mortalidad puede ser considerada relativamente baja (0,4 %), se considera una enfermedad difícil de controlar.