Por la décimo tercera fecha de la Copa de la Liga, Rosario Central cayó ante River por 2 a 1 en un encuentro disputado en el Monumental de Núñez. Lautaro Giaccone había puesto en ventaja a Central, pero Borja con dos tantos revirtió el resultado para El Millonario.
En los primeros '45 minutos, los suplentes de Central jugaron mejor que el poderoso River de Martín Demichelis. Russo dispuso cuidar por completo a su formación titular que fue por completo al banco, puso línea de 5 haciendo debutar un chico de 17 años y al menos en esa primera etapa la apuesta le salió bien al entrenador auriazul.
Central fue ordenado y firme, nunca se regaló, maniató a su rival, que apremiado por las obligaciones se diluyó en la intrascendencia. Sólo el Diablito Etcheverry se destacó en los locales, se sacaba hombres de encima a pura gambeta, pero los visitantes le armaron una marcación escalonada para nunca dejarlo pisar el área. El resto del equipo riverplatense estuvo impreciso con la pelota, careció de sorpresa y se hizo demasiado previsible.
Un pelotazo largo cambiando de frente de Ibarra encontró a Giaccone recostado por izquierda, enganchó para adentro con solo pararla, se acomodó y sacó un zurdazo preciso, esquinado que se coló por el segundo palo de Armani, que voló pero no logró desviar la trayectoria del balón. Golazo.
Incluso tuvo una gran oportunidad para aumentar el Canalla, Giaccone otra vez, esta vez por derecha, dejó en el camino a su marcador, levantó la cabeza y vio el ingreso de Lo Celso, que de zurda, exigió a Armani, que esta vez pudo alcanzar con esfuerzo el balón.
La segunda etapa de Central comenzó contratiempos, enseguida Bravo pidió el cambió por un dolor en la rodilla que probablemente tenga el peor diagnóstico. Otra baja para la Copa Libertadores. Ingresó Sández en su lugar. Pero el Millonario también había echo los suyos. Habían entrado Herrera y Villagra y luego Nacho Fernández y Barco. Demasiado equipo para cualquiera, mucho más para un elenco alternativo.
El agua le empezó a ingresar por todos lados a la defensa auriazul, para colmo de males, se lesiona Coronel, y Komar, que hasta ahí había jugado un gran partido tiene que ir a cubrir el hueco por derecha, el Gitano se quedó en Rosario por una lesión ocular y Russo no tiene nada más por ahí. El medio de River empezó a monopolizar la pelota, las jugadas fueron cada vez de mayor peligro para Werner y el empate estaba al caer.
Borja apareció en toda su dimensión y bien abastecido desde ambos costados, puso el pie para por el 1 a 1 anticipando a Komar, tras un centro desde la derecha y luego con otro desde la izquierda hizo lo mismo con Mallo para sellar la victoria agónica, que no opacó el buen partido que hizo Central, hasta donde le dieron las piernas lo sostuvo, luego no pudo aguantar todo el potencial del elenco de Núñez, que con esta victoria, irá a Córdoba para meterse en la fase final del torneo.
