Por la tercera fecha de la Liga Profesional de Fútbol, Rosario Central venció a Deportivo Riestra en el Bajo Flores con goles de Luca Martínez Dupuy y Fabricio Oviedo, uno en cada tiempo. En tiempo adicionado al reglamentario, Céliz desvió un penal que hubiera significado el descuento. El conjunto de nuestra ciudad enfrentará el martes a Peñarol en Montevideo por la Copa Libertadores, por eso el conjunto de Russo presentó varios suplentes.
En un campo de juego irregular, los canallas dirigidos por Russo se las ingeniaron en la primera etapa para irse en ventaja con un tanto de Martínez Dupuy ingresando al área chica, tras un centro desde la izquierda. Se jugaban pocos minutos y ya Ibarra cargaba con su clásica amonestación por cortar fuerte a la salida de una contra, por suerte luego atenuó su ímpetu y fue una pieza clave en el triunfo.
Después, el partido siempre le quedó incómodo al equipo auriazul en esa primera etapa, por virtudes del rival, que lo luchó e impericia propia. La pelota en ataque duraba poco y la defensa estaba siempre corriendo detrás de rivales que se venían por todas partes. Werner debió esforzarse para ganar dos mano a mano que podrían haberle dado el empate a los de Fabbiani.
Lo mejo de la etapa sin dudas fue el resultado. Llamó la atención la falta de juego asociado del conjunto rosarino, ante un rival inferior, que tan solo con ganas emparejó la mayor jerarquía de los suplentes de Central. Si bien lo sufrió en defensa, el mayor déficit estuvo en la poca contención en la mitad de la cancha.
En la segunda parte las cosas fueron diferentes, Central marcó algo más arriba y dejó de sufrir, cerca de Werner. Ibarra se consolidó y marcó los tiempos, Ortiz comenzó a ganar y soltarse y Riestra se fue frustrando. Sobre que no tenía claridad, el local se fue quedando sin nafta y ya no le alcanzó solo con empuje y garra para acorralar al Canalla.
Russo comenzó a mover el banco, ingresaron algunos titulares y si las diferencias eran notorias antes, se hicieron algo más evidentes. Miguel puso a Módica y el Ogro mandó a una impresentable versión de "Cachete" Acuña, que cuando tuvo una clara para igualar frente a Werner pateó el piso en lugar de la pelota y apenas se la alcanzó al arquero, que además tuvo otra intervención importante sacando un balón con destino de red con su pierna izquierda.
Otro de los ingresados, el juvenil Fabricio Oviedo, que es delantero y así lo demostró con creces en inferiores, <aunque Russo siempre lo puso de volante> mostró credenciales y en la primera que tuvo la mandó al fondo de la red, con remate cruzado, tras gran jugada de Ibarra, que robó y habilitó con maestría.
Luego, otro juvenil, que jugó un gran partido, el chico Giménez cometió una imprudencia, cruzó un rival dentro del área y Lamolina marcó penal, que Céliz, que ya había tenido varias ocasiones de cabeza envió por encima del travesaño ya en el epílogo del partido. De esta forma, el conjunto de Russo se quedó con la victoria en el Bajo Flores, peleada, luchada pero justa.
