Rosario Central le ganó a Caracas FC por 4 a 1 en el Gigante de Arroyito en un partido correspondiente a la quinta fecha del grupo G de la Copa Libertadores de América y mantuvo de esta forma viva la chance de llegar vivo a Uruguay, donde definirá el segundo puesto frente a Peñarol. Los goles del encuentro fueron señalados por Lovera de tiro libre, Módica (2) y Lo Celso. Para el visitante descontó Echenique.
En la primera etapa el partido fue entretenido, con situaciones frente a ambos arcos, pero el peso individual de los auriazules marcó diferencias en el tanteador. Caracas llegó a Rosario sabiendo que la única oportunidad que tenía de seguir con alguna chance de ingresar aunque sea a la Copa Sudamericana era llevarse los tres puntos de Arroyito y salió a disputar cada pelota como si fuera la última.
Central tenía encima los nervios de un compromiso donde todo indicaba tenía que ganar, pero también debía hacerlo en Venezuela y solo logró llevarse un punto, y eso lo obliga a tener que conseguir dos victoria para seguir en esta competencia y el peso de llevar sobre sus espaldas dos derrotas consecutivas, algo poco frecuente en el ciclo del entrenador Canalla.
Los volantes de los de Russo se las ingeniaban para marcar diferencias, Lovera ya había avisado estrellando un remate en el ángulo y luego, de tiro libre abrió el marcador que llevaba algo de tranquilidad. Pernía obligó a Fatu a sacarla al córner en una gran atajada y posteriormente Campaz desbordó por izquierda y Módica puso el 2 a 0 ingresando al área chica por delante de su marcador.
En la segunda mitad, otra vez Módica estiró diferencias, tras una jugada detenida, nuevamente el italiano se escapó de su marca y la empujó el gol, en una noche consagratoria, justo el día en que Enzo Copetti llegó a la ciudad. Central dispuso de tres o cuatro ocasiones más para estirar diferencias, pero por mala puntería todo seguía 3 a 0.
Parecía que el local podía estirar diferencias en cuanto se lo propusiera, pero sin embargo el visitante llegó al descuento tras una gran jugada colectiva por intermedio de Echenique, que venció a Fatu Broun con disparo cruzado. Como para que no hubiera incertidumbre sobre el resultado, ni tiempo para preocuparse, el ingresado Lo Celso puso de zurda el 4 a 1 definitivo ya con tiempo adicionado el reglamentario.
Central consiguió así una vida más, hizo lo que tenía que hacer, quedarse con los tres puntos ante un equipo muy inferior, recuperar algunos rendimientos individuales, y quedarse en la mano con la chance de tener frente a Peñarol una última posibilidad de acceder a la próxima ronda del certamen. Habiendo vencido a Caracas, se aseguró al menos la posibilidad de jugar por un lugar en Copa Sudamericana frente a algún segundo de esa competencia.
