El mercado del petróleo se encuentra en un momento de alta volatilidad debido a las tensiones geopolíticas en Medio Oriente, especialmente tras el ataque con misiles balísticos perpetrado por Irán el pasado 1 de octubre.
Las conversaciones entre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, e Israel para planificar una respuesta al ataque han generado un aumento en el precio del crudo, con los inversores atentos a las posibles represalias que puedan intensificar el conflicto.
Este viernes, el barril Brent, de referencia en Argentina, subió un 1,24%, alcanzando los 78,58 dólares. Por su parte, el West Texas Intermediate (WTI), referencia en el mercado estadounidense, subió un 1,30%, ubicándose en 74,67 dólares (67,71 euros).
Esta subida es reflejo directo de la incertidumbre en torno a las acciones que Israel podría tomar, que según los analistas, podrían desestabilizar aún más el mercado energético.
El repunte en los precios del crudo se aceleró tras el ataque iraní y las tensiones crecientes en la región. Antes del ataque, el Brent estaba cotizando alrededor de 72 dólares por barril, un 9,6% por debajo de su nivel actual.
Este incremento en los precios se produjo en medio de una recuperación parcial tras una caída reciente por la debilidad en el crecimiento económico global y una oferta de petróleo que excedía la demanda.