El Gobierno avanzó en un paquete de licitaciones y concesiones que son inéditas en el país. Mediante concursos públicos empezó a darse forma a un esquema distinto que tiene como protagonistas a los pasos fronterizos terrestres que tiene la Argentina con sus vecinos.
La Casa Rosada concesionará los predios de servicios aledaños a los puntos de cruce de frontera que pasarán a estar manejados por un privado y que será el que tenga que hacer la inversión para mejorar, conservar y explotar el área.
Para que se entienda, ninguna de las fuerzas federales ni de los organismos que intervienen en la frontera desaparecerá, sino que la inversión para mejorar los alicaídos terrenos que lindan con los puestos de control, pasará a manos de privados.
El proyecto se manejó entre tres ministerios: Interior, Seguridad y Defensa. Y si bien todavía no se adjudicó ninguno, dos de ellos ya están en procesos licitatorios.
El primero es el que une la ciudad correntina de Santo Tomé con Sao Borja, en Brasil; el otro, el de Paso del los Libres que lleva a Uruguayana.