España dio su visto bueno este martes al anteproyecto de reducción de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales sin cambios salariales, que ahora debe pasar por el Congreso.
La propuesta se convirtió en bandera de la coalición de partidos de izquierda liderada por el presidente socialista Pedro Sánchez, que la impulsó a pesar de la oposición de las asociaciones patronales.
En su reunión semanal, el Consejo de Ministros aprobó la reducción de las 40 horas actuales mediante un decreto ejecutivo redactado por la ministra de Trabajo Yolanda Díaz, líder del partido de extrema izquierda Sumar, que gobierna con los socialistas.
Díaz enfatizó en que se trató de "un día histórico" porque "han transcurrido más de 41 años" desde la última reducción de la jornada laboral aplicada en España. "La reducción de la jornada laboral va a servir para mejorar la productividad en nuestro país. No se trata de echar horas en el trabajo, se trata de ser eficientes en el trabajo", añadió.