Las "memecoins" impulsaron el rally cripto el año pasado. Ahora podrían estar afectando a todo el mercado Las "memecoins" son criptomonedas creadas principalmente como una broma o referencia a memes de internet, sin un caso de uso sólido o una tecnología innovadora detrás.
Su valor suele estar impulsado por la especulación, el entusiasmo de la comunidad y, en algunos casos, el respaldo de figuras públicas como Elon Musk o Donald Trump.
Ejemplos populares incluyen Dogecoin (DOGE), inspirado en el meme del perro Shiba Inu, y Pepe Coin (PEPE), basado en el personaje de "Pepe the Frog".
A pesar de su origen humorístico, algunas"memecoins" han alcanzado valoraciones multimillonarias y desempeñado un papel clave en el mercado cripto, aunque con alta volatilidad y riesgo de manipulación.
Este tipo de activos vivieron su auge no hace mucho, pero parece que su momento ya pasó, al menos por ahora. El año pasado, el impulso de los activos digitales estuvo liderado principalmente por el Bitcoin y las "memecoins".
En 2024, el Bitcoin (BTCUSD) subió un 119,6%, mientras que el Dogecoin, respaldado por Elon Musk (DOGEUSD), se disparó un 252,8%. Otro token inspirado en perros, el shiba inu (SHIBUSD), avanzó un 104,5% en el mismo período, mientras que bonk coin (BONKUSD) aumentó un 132,1%. Por su parte, pepe coin (PEPEUSD), inspirado en el meme de "Pepe the Frog", registró un asombroso incremento del 1.444,7% el año pasado.
Aunque la mayoría de estas "memecoins"carecen de una utilidad económica significativa, superaron en rendimiento a muchos tokens con casos de uso más sólidos, incluido Ether (ETHUSD), el activo nativo de la blockchain de Ethereum, que alberga la mayor cantidad de aplicaciones descentralizadas.
En comparación, Ether subió solo un 53% en 2024.
Sin embargo, en lo que va de 2025, la mayoría, si no todas, las"memecoins"han caído, afectadas por controversias y escándalos en torno a ciertos proyectos, lo que ha impactado negativamente a todo el mercado cripto.
La capitalización de mercado de estas criptomonedas alcanzó un máximo de 137.000 millones de dólares el 8 de diciembre, pero desde entonces ha retrocedido un 59%, situándose en torno a los 56.200 millones de dólares hasta el miércoles.
