La operación, un reemplazo de cadera con prótesis, se extendió por varias horas. Si bien el parte médico se mantiene reservado para la familia, se sabe que Casero venía sufriendo intensos dolores en la cadera desde hace meses.
Los problemas de cadera del actor lo habían limitado considerablemente en los últimos tiempos.
La intensidad del dolor fue tal que incluso debió recurrir a una silla de ruedas para la última función de su obra teatral.
Hace poco más de un mes, Casero incluso se retiró de una internación para no faltar a una presentación.
Ya había sido hospitalizado en dos ocasiones por este motivo, poniendo en riesgo su continuidad en los escenarios.
Se sabe que estos problemas se originaron en la época en la que el actor tenía sobrepeso, generando fuertes dolores que lo afectaron considerablemente.