Sin embargo, el comportamiento varió según el tipo de combustible. Mientras que el consumo de nafta exhibió una recuperación del 3,51%, el gasoil registró una nueva contracción del 2,34% en términos interanuales.
La nafta Premium fue la que mostró un mejor desempeño, con un aumento interanual del 17,7%. Le siguió el gasoil grado 3, que creció un 11%.
En contraste, la nafta súper retrocedió un 0,64% y el gasoil común cayó un 9,46%.