Así lo adelantó la presidenta en su discurso ante el Parlamento, al destacar que el derecho a protestar no puede afectar a otros ciudadanos, por más razón que tengan. Al abordar el tema de la Seguridad y de Justicia, dijo que “vamos a sacar alguna normativa de respeto a la convivencia ciudadana” porque “no puede ser que diez personas corten una calle, por más razones que tengan, y que no pase nada”.
Cristina Fernández aseveró que “todo el mundo tiene derecho a protestar, pero no impidiendo a la gente que vaya a trabajar, por lo cual vamos a tener que legislar” sobre la materia.
Asimismo, pidió que una vez que se cuente con esa legislación, se requerirá que “la Justicia actúe en estos casos también, porque no podemos solos organizar las cosas”.
Cuestionó a actores de la justicia, como fiscales o jueces, que cuando son llamados por el poder político para resolver crisis en horas de la madrugada, “salvo honrosas excepciones, no te atiende nadie”.
Puso como ejemplo el caso de la reciente ocupación de un predio en Villa Lugano, e informó que ayer conversó con el jefe del gobierno porteño, Mauricio Macri, sobre ese conflicto.
“Convinimos ambos –reveló- en que si el fiscal hubiera estado en el momento indicado, cuando había sólo diez o doce personas ocupando el predio, hubiera sido posible el desalojo sin hacer ningún desastre, pero cuando se te meten mil personas, con chicos y mujeres, se torna muy difícil el desalojo”.
Sostuvo que “necesitamos una justicia ágil, para que cuando la llamen del poder político venga, disponga y haga cumplir la ley”.
“Por eso –pidió- organicémonos como sociedad, permitamos protestar pero respetando a los demás ciudadanos: tenemos que lograrlo entre todas las fuerzas públicas, aunque pensemos en las antípodas, aunque no haya acuerdo en nada, por favor, en el respeto a los ciudadanos pongámonos de acuerdo de una vez por todas”.

