Tres partidos sin marcar y toda la presión sobre sus espaldas. Pero nada le pesó a Lionel Messi cuando a los 20 minutos, después de una infracción que le cometieron en la puerta del área, por detrás de la medialuna, se hizo cargo del tiro libre.
La Pulga puso la pelota por el costado de la barrera y la clavó en el ángulo, para festejar después de tres partidos.
Messi deseaba tanto su segundo gol que a los 26 minutos al fina alcanzó. La Pulga inició el contragolpe y la tocó a la izquierda para Neymar, quien metió el pase raso para que Messi o Luis Suárez definieran.
Leo llegó primero y entonces alcanzó su gol 252 en la Liga española para ser el único máximo artillero.
Cinco minutos más tarde, después de una pared con Neymar, impactó la pelota que se metió pegada al palo para el 5-1 de Barcelona en una jornada histórica para el argentino y para todo el fútbol español.
