Luego Barcelona se recuperó con dos magistrales disparos por la misma vía de Messi, elegido mejor jugador de la final, una conquista del brasileño Rafinha y un gol del uruguayo Luis Suárez.
Sin embargo, el elenco andaluz concretó una remontada bárbara en el segundo tiempo y empató 4-4 gracias a las anotaciones de José Antonio Reyes, el francés Kevin Gameiro de penal y el ucraniano Yevhen Konoplyanka, a sólo nueve minutos del epílogo.
En tiempo suplementario, a cinco minutos de que el título se definiera desde el punto del penal, apareció Pedro Rodríguez, reemplazante de Mascherano en el alague, para darle el título al conjunto catalán que conduce Luis Enrique.

