Fue en la sesión de esta semana, enla última intervención de Camaño y el radical Mario Negri, jefe del interbloque Cambiemos, ni atinó a proteger a Aranguren: “Si alguien tiene un negocio especulativo debe ir preso”, respondió. Según la diputada massista, la punta del iceberg es el decreto 893 del 25 de julio, que habilita al ministro de Energía a autorizar “exportaciones temporarias” de gas “para posibilitar la utilización de la infraestructura de los países vecinos” en el “transporte del gas natural al mercado interno argentino”. “Uno mira el decreto y piensa: ¿Cómo no ser solidario con los países vecinos?
Pero cuando lo miran los ojos de un experto, se advierte cómo el señor Aranguren va a hacer el negocio con su empresa Shell”, denunció Camaño, quien dijo sin vueltas que el ministro tiene “alguna cuestión con Chile y la exportación de gas”. No es una novedad: uno de los frentes judiciales del ex CEO de Shell es por haber importado gas natural de Chile a un precio más alto que el ofrecido por Bolivia, en conflicto con los transandinos por el eterno reclamo de una salida al mar.