Explicó, en ese sentido: “Es un preventivo de crisis que se extiende ante el 31 de marzo de 2021, lo que es una locura, porque significa que la empresa va a poder disponer de despedir, suspender y hasta pagar el 50% de indemnizaciones en el momento que se le plazca”.
Además, “nos cambian la base de cálculo para el aumento salarial de las nuevas paritarias, y no nos están asegurando el no cierre de los locales”.
“La empresa queda facultada para hacer lo que quiera con la gente y el gobierno le perdona el 50% de las cargas sociales, pero a nosotros nos descuentan el 100%, o sea que nosotros mismos nos vamos a pagar las indemnizaciones”, analizó.