En los argumentos de cada una de las defensas invocan la falta de imparcialidad por parte del juez, a raíz del interés que el Gobierno tiene en él para ocupar un cargo clave y por consecuencia en el resultado del juicio que afronta Boudou.
La recusación tiene lugar previo a las últimas palabras que el Tribunal le da la posibilidad de dar a todos los acusados, entre ellos al ex vicepresidente que estaba pautada para hoy. En tanto, para éste jueves está previsto el veredicto por parte del Tribunal sobre la causa en al que se investiga la compra de la imprenta.