En el día de ayer murió Norberto Martínez, ex director de Protocolo del Concejo Municipal de Rosario. Estaba a punto de recibir el alta, tras cursar coronavirus, pero lo sorprendió un infarto del que no pudo reponerse. Dolor entre ex compañeros y allegados.
Norberto ingresó a los 16 años a la Municipalidad de Rosario, a la Escuela de Jardinería, luego fue pasando por diferentes lugares, hasta que llegó al legislativo local. En la entonces Dirección General de Prensa y Protocolo, Adelma Aldana, otra ex titular que marcó una época lo forjó a su imagen y semejanza. Norberto aprendió de ella el oficio y lo ejerció posteriormente con eficacia y dedicación.
Marcó sin dudas una época, a tal punto que desde su retiro, hace unos tres años todavía no se cubrió el cargo vacante. Fue distinguido por el cuerpo como ciudadano destacado de la ciudad, en un acto con su impronta en el que tuvo que hacer incluso de maestro de ceremonias.
Era un tipo amable, estaba en todos los detalles, no se le escapaba nada, siempre dispuesto a dar todo por la organización del evento, hacía sentir al homenajeado de turno como una estrella, no importando su trascendencia real. Gentil, elegante, predispuesto, se ocupaba de recibir a los invitados, ubicarlos, hacer de presentador, despedir a cada uno, acompañarlos hasta la salida, estaba en cada detalle para hacerlos sentir en su casa.
Sumamente meticuloso, alegre, con gran sentido del humor, se destacó por su hombría de bien y compañerismo. Tras su jubilación a temprana edad, dado la cantidad de años de servicio, fue contratado incluso por el Concejo Municipal para ser anfitrión de actos de relevancia. Era actualmente profesor de IESERH Rosario.
Ayer dejó un recuerdo imborrable entre sus allegados al partir, y hoy sus ex compañeros se llegarán a darle el último adiós en el Cementerio el Salvador a las 10, ante la falta de velatorio por protocolo covid.
