Mientras continúa la investigación judicial de la visita de seis diputados libertarios a represores en la cárcel de Ezeiza, entre cuyos gestores aparece el sacerdote Javier Olivera Ravasi, la iglesia decidió apartar al cura. El sacerdote fue echado de la Diócesis de Zárate-Campana, con el argumento de las “numerosas quejas fundadas por sus expresiones y actitudes que se oponían al testimonio cristiano”.
La sanción se tomó luego de que la propia Conferencia Episcopal emitió un comunicado tomando distancia de las gestiones que hizo el cura y de fuertes gestos del papa Francisco que recibió a víctimas de la última dictadura militar.
En el encuentro celebrado el martes con el presidente de la Conferencia Episcopal, Oscar Ojea, y con el vicepresidente del mismo cuerpo, obispo Marcelo Colombo, una delegación de representantes de los organismos defensores de derechos humanos había pedido la expulsión de Olivera Ravasi de la Iglesia “por las actividades que viene desarrollando y por ser heredero del proyecto de impunidad de los genocidas”.
En el comunicado eclesiástico se recuerda ahora que “el sacerdote, Presbítero Javier Olivera Ravasi, está incardinado en la Diócesis de San Rafael, Provincia de Mendoza, y fuera de la misma desde hace varios años” y que “por razones familiares que aludió, solicitó residir en esta Diócesis de Zárate-Campana”.
En el mismo texto se advierte que ese permiso le fue concedido “por el término de cuatro meses, desde el 20 de agosto de 2019 hasta el 31 de diciembre del mismo año, quien posteriormente dejó el lugar y retornó varias veces sin aviso alguno”.
“Dado que en reiteradas ocasiones se recibieron en este Obispado numerosas quejas fundadas por sus expresiones y actitudes, que se oponían al testimonio cristiano -máxime proviniendo de un sacerdote-, se le pidió un cambio de actitud y comportamiento en su proceder. Al no observarse hasta el presente el cambio requerido en su actitud, y teniendo en cuenta que el mencionado sacerdote no pertenece a esta Diócesis de Zárate-Campana así como por el bien de la comunidad diocesana, hechas las consultas pertinentes, se le ha comunicado que en adelante no tiene autorización para residir en esta Diócesis”, informó en un comunicado.