La medida apunta a promover la reinserción social y reducir la reincidencia, según lo estipulado en la ley de Ejecución de la Pena Privativa de la Libertad (Nº 24.660) y la Constitución Nacional. Además, busca disminuir la ociosidad entre los internos, considerada un factor de incremento de violencia y desorden en los penales.
De acuerdo a la resolución publicada hoy, los internos deberán realizar tareas de mantenimiento, limpieza, aseo e higiene en los espacios propios y comunes dentro en los establecimientos a los que pertenecen y se encuentran albergados.
El Servicio Penitenciario Federal será el encargado de elaborar planes y cronogramas específicos para estas tareas, además de supervisar su cumplimiento.
La resolución, firmada por la ministra Patricia Bullrich, enfatiza que estas labores constituyen un deber derivado del mandato constitucional de mantener cárceles "sanas y limpias" y contribuyen a una convivencia ordenada dentro de los establecimientos.