Por su parte, Netanyahu ofreció una versión detallada de la situación en Medio Oriente, marcada por el enfrentamiento bélico directo con la República Islámica de Irán liderada por Alí Jamenei que inició el pasado viernes, y que lo obligó a ordenar el cierre de sus embajadas en el extranjero.
Este martes, el Ejército israelí informó la abatida contra Ali Shadmani, jefe del Estado Mayor de Irán en tiempos de guerra y una de las figuras militares de más alto rango de la República Islámica, en un ataque aéreo nocturno contra un centro de mando en el centro de Teherán.
En las últimas horas, la escalada de ataques entre ambas naciones dio lugar a las declaraciones de Netanyahu, quien sugirió que el asesinato del líder iraní, el ayatollah Alí Khamenei, podría concluir con el conflicto en pleno lanzamiento de la operación militar denominada "León Ascendente", que persigue el objetivo de frenar lo que calificó como “la amenaza iraní contra la supervivencia misma de Israel”.
"Esta operación continuará el tiempo que sea necesario para eliminar esa amenaza. Durante décadas, los tiranos de Teherán han pedido abierta y descaradamente la destrucción de Israel", alertó.