En el remozado Marcelo Bielsa, Newell's recibió a Banfield, por la segunda fecha del Torneo Clausura. Los de Pedro Troglio se impusieron por 2 a 1 con dos tantos de Auzmendi. Eber Banega había puesto el empate parcial para los de Fabbiani, pero el Taladro finalmente se quedó con un triunfo justo.
Navas se bajó dos horas antes del partido, a la dirigencia leprosa y a su técnico parece no entrarle que el jugador no quiere seguir en el país, ni en Newell's y desea emigrar a México, más cerca de su familia y por eso Pumas puso sobre la mesa una oferta de 2,3 millones de dólares por un arquero de 38 años.
Hasta un rato antes, el experimentado golero costarricense atajaba, entró a hacer la entrada en calor, pero no salió nuevamente al campo de juego. Esto fue un duro golpe para el vestuario rojinegro, la cabeza de los jugadores no pareció haber estado esta noche el 100% en el césped y las probables discusiones que seguramente quedarán puertas para adentro afectaron el rendimiento del equipo.
Newell's jugó mal, bastante mal, no es posible determinar hasta que grado afectado por el entredicho, lo cierto es que Banfield fu muy superior durante todo el encuentro. Los de Pedro, que padecen severos problemas económicos y se arreglan con lo que pueden, se mostraron aguerridos, con un par de jugadores muy interesantes, que gambetean para adelante, como el autor de los dos tantos y Ríos dos volantes movedizos, que la piden siempre y juegan de primera.
Banega se movió demasiado lejos de la zona de gestación de juego, y un Maroni inconexo con el resto, Newell's padeció el encuentro. Incluso Banfield se pone en ventaja demasiado tarde en el primer tiempo, Barlasina evitó que el tanto llegara antes con un par de intervenciones notables, que hacen pensar si Newell's realmente necesita un arquero, ante la inminente salida de Navas. La Lepra se fue al descanso apenas 1 a 0 en contra y quizás eso haya sido lo mejor que le pasó en el primer tiempo.
En el complemento nada cambió, ante la presión de la gente, por obligación Newell´s fue hacia adelante y encontró la igualdad por intermedio de Banega, que le pegó fuerte a un tiro libre desde la medialuna, la pelota se desvió en la nuca de un defensor en la barrera y descolocó al arquero. Ni siquiera la igualdad parcial cambió el partido.
Acto seguido se vieron los mejores minutos de Banfield, se adueñó de la pelota, la movió de lado a lado, ante el desconcierto local. De un tiro libre, en iguales circunstancias al de Newell's llegó el 2 a 1, rebote y gol. Merecido. Llovieron proyectiles sobre el festejo visitante, el juego estuvo demorado, y eso le permitió a Baliño adicionar 8 minutos, en los que el local tuvo una clarísima que merodeó la línea y el visitante casi convierte en la última, en la que Barlasina sacó con su pierna el 3 a 1, que no le hubiera quedado mal al score del partido.
Soltar. Cuando las cosas no salen como queremos, tenemos que dejar que sucedan tal cual el destino así lo quiere. De lo contrario, lo extra futbolístico se mete en el vestuario y afecta el rendimiento del plantel. Deberá hacerlo pronto. La novela Navas llegó a su fin y como todas las novelas, no siempre tienen un final feliz.