Dijo que si se concreta el préstamo, "se gastará mal, como todo el financiamiento vía deuda externa de los últimos 200 años" y remarcó que este dinero no ayudará a incrementar la capacidad productiva ni hará que haya más y mejor trabajo.
Guzmán se pronunció en reiteradas oportunidades en contra del endeudamiento externo, apuntó contra el plan económico de la administración libertaria y señaló que era necesario revertir las expectativas del mercado: "Luego de vender en el mercado cambiario 1.110 millones de USD en tres días, que provenían del préstamo que le dio el FMI al gobierno argentino en abril para apoyar sus chances electorales, la corrida cambiaria se iba a acelerar si no había ninguna noticia que modificase las expectativas de mercado".
De esta manera, citó al actual ministro de Economía y apuntó que el objetivo central del Gobierno es "'vender hasta el último dólar' para intentar sostener su cotización hasta las elecciones del 26 de octubre".