El anuncio se produjo pocas horas después de que el mandatario advirtiera que podría suspender su próxima reunión con el líder chino, Xi Jinping.
A través de su cuenta en Truth Social, Trump señaló que China decidió “imponer controles de exportación a gran escala” sobre numerosos productos, lo que calificó como “una vergüenza”. Según el mandatario, la decisión de Pekín constituye una postura comercial “extremadamente agresiva”.
El republicano ya había amenazado con un incremento “masivo” de aranceles a los bienes chinos en respuesta a los recientes límites que China impuso a la exportación de tierras raras, materiales esenciales para la producción tecnológica y manufacturera.
De acuerdo con Trump, el gobierno chino estaría notificando a distintos países sobre los elementos afectados, lo que, a su juicio, generaría una fuerte distorsión en los mercados internacionales.
