Los manifestantes respondían arrojando piedras contra los uniformados frente a la Casa de Gobierno. Media hora después y cuando ya se contabilizaba alrededor de una veintena de heridos, ingresó a la Plaza el cuerpo de la Montada de la policía tucumana, que realizó cargas contra los manifestantes, quienes se resistían a abandonar el lugar.
Según denuncias de los manifestantes, al menos cinco personas fueron detenidas y se encontraban alojadas en el interior de la Gobernación, aunque esta información no pudo ser confirmada oficialmente.