Hasta que la Cámara de Apelaciones resuelva la cuestión de fondo, seguirá firme la medida cautelar convalidada por la jueza Silvia Aramberri, que autoriza a las madres a continuar con el autocultivo.
A través de sus abogados, la Secretaría de Salud dependiente del Ministerio de Desarrollo Social apeló ambas partes de la resolución: cuestionó la orden de comenzar a suministrar los aceites, y también la decisión de la magistrada de autorizar a las madres a cultivar en sus domicilios.
El cuestionamiento apunta a la utilización de los aceites por fuera de los casos de epilepsias refractarias que los mecanismos vigentes hoy permiten, desconociendo los aportes científicos que avalaron la presentación de las madres y que tienen consenso y reconocimiento institucional en el mundo científico y académico.