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El funcionario analizó el funcionamiento del sistema judicial argentino y consideró que viene sufriendo "un deterioro muy fuerte" desde el regreso de la democracia y aseguró que desde que asumió el actual Gobierno se ha realizado una tarea muy fuerte para contrarrestar esa situación. No obstante, reconoció que hay cosas que se deben seguir corrigiendo.
"La Argentina tiene altísimos niveles de impunidad en general, no solo frente a la corrupción u otros delitos más sofisticados sino frente a cualquier tipo de delitos", afirmó.
"Nuestros niveles de impunidad son superiores al 99%, cada 100 delitos que se cometen menos de uno tiene una sanción efectiva por parte del Estado, y estamos incluyendo homicidios, narcotráfico, corrupción. Estos niveles de impunidad se dan mucho más en los niveles complejos, es decir en los de cuello blanco, que en los simples", añadió.