El ministro de Defensa, Luis Petri, salió a defenderse tras recibir críticas por su polémica decisión de autorizar a militares a detener civiles que hayan cometido delitos de flagrancia y negó que viole la Ley de Seguridad Interior.
«Lo han podido hacer siempre. Hay una confusión. La aprehensión en flagrancia la puede hacer cualquier persona, según el artículo 183 del Código Procesal Penal. No hace falta ser agente de seguridad», comenzó señalando el dirigente de origen radical.
El funcionario fue consultado sobre si eso contradice la Ley de Seguridad Interior, a lo que respondió: «No, las Fuerzas Armadas estarán en zonas inhóspitas, no en lugares poblados ni en pasos fronterizos habilitados».
«El kirchnerismo envió a las Fuerzas Armadas a la frontera durante el Operativo Escudo Norte (2011-2016), pero sin darles facultades. Nosotros las estamos capacitando y equipando», agregó.